La inteligencia artificial hace posible que las máquinas aprendan de las experiencias y posiblemente realicen actividades como los humanos. Su objetivo es maximizar la productividad, garantizar la calidad y la seguridad y optimizar los resultados comerciales.
La inteligencia artificial (IA) puede contribuir a los procesos en las empresas, pero sabemos que la adopción de una nueva tecnología no es automática y no ocurre de la noche a la mañana. En lugar de automatizar las tareas manuales, la IA realiza tareas frecuentes, voluminosas e informatizadas de forma fiable y sin fatiga. Para este tipo de automatización, la interferencia humana sigue siendo esencial. El gerente del Senai Artificial Intelligence Hub, Felipe Couto, y el consultor y científico de datos del Grupo Botícário, Bruno Golfette, conversan sobre el tema.
Fonte: Sistema FIEP